La lengua de signos española y la lengua de signos catalana (en la Comunidad Autónoma de Cataluña) alcanzaron su reconocimiento en el Estado Español en el año 2007 con la Ley 27/2007, de 23 de octubre, por la que se reconocen las lenguas de signos españolas y se regulan los medios de apoyo a la comunicación oral de las personas sordas, con discapacidad auditiva y sordociegas (BOE del 24 de octubre). Esta ley define las lenguas de signos como “lenguas o sistemas lingüísticos de carácter visual, espacial, gestual y manual en cuya con formación intervienen factores históricos, culturales, lingüísticos y sociales”. Coincide así con la gran mayoría de los expertos en lingüística, diccionarios y enciclopedias de lingüística cuando afirman que las lenguas de signos son lenguas visuales y gestuales. Esta diferencia en el canal de transmisión de la lengua conlleva una diferencia en su forma de producción y recepción pero completamente congruente con la tipología de la lingüística universal.
“Nuestra competencia comunicativa y nuestra capacidad para aprender nuevas lenguas crecen exponencialmente en función de las habilidades y destrezas lingüísticas, sociales y culturales añadidas a nuestro repertorio. De este modo, en la medida en que somos capaces de comunicar en una nueva lengua, enriquecemos nuestra capacidad de comunicación a nivel global. Un buen marino es aquel que ha navegado en muchos barcos diferentes, desde la balsa de totora hasta un superpetrolero” (García Doval et al. 2004: 82).
Nuestro objetivo no es otro quedar un paso más hacia la normalización lingüística de la lengua de signos española, integrando la lengua de signos española en el paradigma del plurilingüismo y del valor de las lenguas para la cohesión ciudadana. En otras palabras, nuestro objetivo es contribuir al derribo de las barreras lingüísticas que aún existen entre las personas de un mismo Estado, incluso entre personas que se encuentran en un barrio de la misma ciudad: entre personas sordas y oyentes. Actividad sin Créditos (con Certificado de asistencia, si procede).
A pagar una vez iniciado el curso, coste adicional del MATERIAL DIDÁCTICO DEL CURSO -NO INCLUIDO EN EL PRECIO DE MATRÍCULA- a cargo del alumno: 20 € (aprox.).
La condición de "Alumnos UNED" y la de "Estudiantes de la Universidad de Cantabria (UC)"deberá acreditarse con la documentación correspondiente: Carnet de estudiante o comprobante de matrícula en la UNED o en la UC, curso 2013-2014.
En caso de no entregarse el justificante de pago y/o la mencionada documentación por cualquiera de las vías establecidas (correo electrónico, fax o presencialmente en la Secretaría del Centro Asociado), no se considerará realizada la matrícula. El correo electrónico al que enviar la documentación es: cursos@santander.uned.es
Actividad sin Créditos (con Certificado de asistencia, si procede). Es preciso asistir al 80% de las sesiones, para lo que está establecido un sistema de control electrónico y personal para que cada estudiante registre a diario su propia asistencia.
Las peticiones de BAJA O ANULACIÓN DE MATRÍCULA deberán acreditarse siempre mediante justificante de la circunstancia sobrevenida que impida su realización. En cualquier caso, deberán ser notificadas por escrito (correo electrónico o fax) hasta 3 días naturales antes del comienzo de la actividad. Pasado este periodo, la matrícula sólo será devuelta en caso de incompatibilidad laboral sobrevenida (en el caso de que coincidieran el horario del curso y el laboral), para lo que el alumno deberá presentar igualmente la documentación que así lo acredite.
- Observaciones: El Centro Asociado de la UNED en Cantabria se reserva el derecho de admitir el acceso al aula en el que se imparta el curso únicamente a quienes cumplan los requisitos de matriculación indicados en los dos primeros párrafos de este apartado, procediendo, si se diera el caso, a actuar oportunamente con el fin de resolver la situación.
Matrícula Ordinaria | Alumnos UNED | Estudiantes de la Universidad de Cantabria | |
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Precio | 90 € | 80 € | 80 € |
· Reconocer y comprender vocabulario y frases sencillas y breves signados con claridad y lentitud sobre aspectos de la vida cotidiana como:
- Presentarse a uno mismo y despedirse, respetando las normas de interacción de la comunicación signada.
- Describirse (físicamente) y dar información personal y familiar y sobre su lugar de residencia.
- Solicitar y dar instrucciones sencillas sobre orientaciones y localizaciones y sobre horas y fechas.
· Participar en intercambios comunicativos breves sobre actividades y asuntos cotidianos siempre que sean a un ritmo pausado y el interlocutor colabore usando expresiones y fórmulas simples y claras, encaminadas a solucionar con éxito la interacción. Más en concreto podrá: Saludar y responder a un saludo.
- Información sobre identificación y caracterización personal (relaciones familiares, profesiones, estudios).
- Instrucciones sobre orientación y localización en el espacio, así como horarios y fechas.