El poder no es tal si no muestra su capacidad para influir en la sociedad. El presente curso se adentra en las relaciones que a lo largo de la historia han mantenido los que ostentan la autoridad y el pueblo que la observa. Nuestra sociedad hunde sus raíces en el mundo clásico y sus ostentaciones de poder, siendo Augusto quien concrete el paradigma que se extenderá por el Occidente europeo tras la caída del Impero Romano. Esta tradición será recogida por los gobernantes posteriores y el caso del reino de Mallorca es paradigmático al respecto. Pero no todo ha de ser perdurable, pues el arte efímero, concebido para festejos concretos, revela la relación del pueblo con su soberano. En este sentido, la Iglesia no permaneció al margen de ello y con el Concilio de Trento se dio forma a la representación del poder espiritual a través del arte.
C.A. UNED Illes Balears
Esta actividad forma parte de las actividades del 50 aniversario de la UNED.
Esta actividad impacta en los siguientes Objetivos de Desarrollo Sostenible: