Las obras de Georges Ward, Esmeralda Sánchez Blanco, Pedro Saura y Marisa Royo transitan por un cosmos de mixtura entre lo real y lo fantástico. Y es la fusión de esos dos planos, alejados de toda intención naturalista, la que les confiere esa especial seducción que difícilmente dejará indiferente a quienes las contemplen.